"En este contexto, también me intrigó descubrir que sus influencias afroamericanas a menudo fueron borradas o redefinidas como arte europeo o estadounidense por los marchantes de arte, e incluso por su familia, porque sus obras fueron acogidas por la cultura popular estadounidense en museos y galerías privadas como parte del estilo modernista estadounidense en movimiento. "
Detalles de la obra de “The Offs”, en el puede observarse un NKISI, protector y guardian de los BOKONOR dentro del Voodo Hatiano. En la espalda la carga mágica.
¿Quién es Jean Michel Basquiat?, para muchos un genio, para otros un producto de mercado.
Debido a ciertos sucesos que aparecerán en este libro, entre anécdotas, y datos curiosos, así como, la biografía oficial, que la hay, plasmada en muchas web, y diferentes libros, trataremos por primera vez en español, al genio, al hombre, así como haremos un profundo análisis en su simbolismo, que está lleno de espiritualidad y magia, heredada por parte de su padre Gerard Basquiat en las raíces del Vudú Haitiano, y la diosa Erzulie, también a través de su musa Suzanne Mallouk, cuya madre era una terrible y reconocida bruja que se pasaba el día echando maldiciones a todo ser que no vibrara en armonía con ella.
Gala era el espíritu que hacía vibrar la magia de Dalí, y Mallouk era la musa que hacía vibrar y caer en espiral a Basquiat.
¡Warhol y Basquiat!, mucho se ha escrito, de su amor, de su locura, de quién utilizó a quién, pero hay algo cierto, Basquiat, ya de por sí drogadicto, destrozó su alma hacia acantilados profundos, después de discutir con Warhol, marcharse a Hawaii, recibir una llamada telefónica confirmando la muerte de Andy lo ensimismó en los infiernos de Dante, a través de imágenes infantiles, de pesadillas y gritos reflejados en las obras de esa nueva fase que lo llevaría directamente a la muerte.
Casi siempre, en esos catálogos irracionales, definidos como razonados en el mundo del arte, se obvia al hombre, y se mistifica apasionadamente al genio, algo erróneo, Basquiat dejó en un momento de su vida, olvidados en el metro de Nueva York, 2.000 dibujos nunca encontrados…
Tampoco vistos, ni conocidos, solo por sus seres más cercanos, nunca su padre, solo su madre, tampoco sus hermanos…
Y que decir, de todas las obras que vendía en sus estudios directamente a los clientes, antes de comprar heroína.